domingo, 28 de febrero de 2016

YOU ARE MY FRIDAY



Te escribo a escondidas esperando que me leas,

sin decirte nada y de puntillas.

Justo como tú entraste en mi vida. Hace cuatro años que no me asomo por aquí pero no hay mejor forma de reabrirlo que con tu onceavo.

"Una guerra" al máximo, y mi índice no hace más que borrar las pocas líneas que soy capaz de escribirte. Antes era más fácil, ahora eres tan tan mío que es difícil contarte algo que no te haya contado ya.

Hablando de amor. 
¿Sabías que toda la ciudad de Pompeya fue sepultada por la lava de un volcán y supo renacer de sus propias cenizas? Justo como tú haces conmigo. No creo que haya cosa en esta vida que tu amor no pueda elevar al cielo. Porque cuando hay amor, ¿qué más hace falta? 

Tú sabes volar sin levantar los pies del suelo.

Sabes hacer reír sin abrir la boca.

Sabes crear de la nada, y acabar convirtiéndolo en todo.

Ir a contracorriente y conseguir cambiar hasta al aire de opinión y que acabe poniéndose a tu favor.

A ti es imposible no quererte. A ti es imposible no soñarte.
Sin ti es imposible ser, y contigo no se puede ser mejor.

Ya lo dije hace tiempo, las comillas del principio no tiene sentido sin las del final. Y desde luego que la vida sin ti no tiene ni siquiera comienzo.

sábado, 28 de abril de 2012

Más un sábado tarde que la mañana del lunes

Yo también te necesito, así que si te vas tampoco sé que sería de mí. Me gustas más borracho de amor sin alcohol, con mi sonrisa reflejada en tus ojos y algún que otro piropo después de cada beso. Con mis labios erosionando tu cuello a mi antojo y mi mano izquierda perdida por tu pelo. Cuando mas me gustas es cuando me quieres para siempre y para nunca, cuando cantas y me matas de amor en una esquina. Al despedirte con un beso en la frente y cuando me coges de la cintura en un arrebato de locura. También me gustas cuando la nata pierde todo el significado que tiene para mí si no va ligado a ti, al igual que las velas o "Desayuno con diamantes". Cuando miras, el mundo tiembla y luego te ries. Me gustas siempre, no a ratos. Con nuestros besos eternos con un par de rosas en la mano, con las más de treinta millones de sonrisas e infinitas noches en las que las sábanas necesitan su presencia. 




jueves, 19 de abril de 2012

Siempre es siempre

Los besos siempre han sabido mejor cuando provienen de ti, y aún sigo teniendo curiosidad por saber cómo coño sabe tu piel cuando te despiertas y que es lo primero que haces cuando abres los ojos. Quiero ver cuales son las mil y una maneras distintas que tienes de dormir y tu cara al oírme decir por las mañanas que tus brazos son la mejor manta contra el frío. Quiero que me abraces como haces ahora, pero por mucho tiempo, tantos días que perdamos la cuenta y no sepamos si es 14 o 27. Seguir siendo inmune a todo menos a ti y que los sábados tarde lleven mi nombre grabado en mayúsculas. Que mi regalo de Navidad jamás acabe y mis ganas locas de verte hagan un pacto con las tuyas. Que a tu almohada no se le vaya nunca mi olor y tu habitación me recuerde como la que siempre está y no como una que viene y se va.



lunes, 9 de abril de 2012

Donde todo es nada sin ti

No me gusta la rutina, el paso del tiempo o las malas decisiones. Detesto los finales, tanto si son felices como si no; la palabra fin implica que ya no hay más, que no sigue, que se acaba. Y querer es difícil, pero como todo, lo bonito cuesta, y no creo que nadie en este mundo prefiera algo simple a algo realmente bonito. Y menos si ese algo se reduce a las dos letras de tu nombre. Es mucho mejor un amor de verdad que mil noches bonitas de mentira. Un desayuno en una cafetería a tu lado que un desayuno con diamantes sin ti.
Y tú eres tú, y yo, soy yo. Bueno no, miento no hay tú, ni hay yo, nosotros. Con todas las ganas del mundo que tengo y que me faltan, así te quiero. No a ratos, yo siempre.









martes, 21 de febrero de 2012

Si yo contigo

Como una calada a un cigarro al que aún le queda mucho para apagarse, como una noche junto al edredón al lado de tu olor y enfrente de tu silencio. Un verde, el balcón y tú camiseta sobre mí. Mesón de paredes, un garito en el culo del mundo o Neptuno. Amor, cuanto amor, los días pares, los imparse y los 30 de febrero. Una toalla limpia y un radiador que no da calor. Una historia larga, casi 300 días y demasiadas sonrisas por tu culpa. Como la soltura con la que un cirujano se pone unos guantes y la cantidad de besos desperdiciados. Ganas de comernos, de aprendernos. Una canción que nunca termina, como lo nuestro. Amor complicado, que nadie entendería. El amor está ahi. Y cuando es evidente, cuando se quiere de una forma tan bonita, tan kilométrica..es necesario



domingo, 12 de febrero de 2012

Lo escucharás tantas veces como me llames

- Hola, soy el contestador automático de Marta, en estos momentos no te puede atender, tampoco vas a poder dejar un mensaje para ella después de la señal, no habrá ningún pitido después de que me escuches hablar. No quiere saber de nadie, y mucho menos de ti si es para decirle que hace demasiado que no la ves, que siempre es lo mismo y que estás hasta las narices de su puta vida y su perfecto novio. No quiere oírte decir que sabes de que color es su pelo por vuestras fotos juntas de hace mil y su voz por los vídeos de los festivales de Navidad que hacíais cuando erais pequeñas. No quiere ni oírte, ni verte, hace ya bastante que se cansó de vuestras borderías los jueves por la mañana e indirectas los viernes antes de salir de clase. Hace ya bastante que se cansó de vuestro mundo, ese que antes le pertenecía. No esperes que te llame de vuelta, ella sólo le devuelve las llamadas a quienes de verdad valen la pena; y tú, tú ya nunca lo harás. Hasta siempre, sé feliz.



miércoles, 8 de febrero de 2012

Un beso hasta el infinito

Como una calada a un cigarro al que aún le queda mucho para apagarse, como una noche junto al edredón al lado de tu olor y enfrente de tu silencio. Un verde, el balcón y tú camiseta sobre mí. Mesón de paredes, un garito en el culo del mundo o Neptuno. Amor, cuanto amor, los días pares, los imparse y los 30 de febrero. Una toalla limpia y un radiador que no da calor. Una historia larga, casi 300 días y demasiadas sonrisas por tu culpa. Como la soltura con la que un cirujano se pone unos guantes. Las ganas de comernos, de aprendernos. Una canción que nunca termina, como lo nuestro. Amor complicado, que nadie entendería. El amor está ahi. Y cuando es evidente, cuando se quiere de una forma tan bonita, de una forma tan inmensa, es necesario.